Con seguridad muchas personas, muchas, no tienen referencia alguna cuando se menciona el nombre de Leonardo Boff, como quizá tampoco hayan oído hablar de Paulo Freire o incluso de Eduardo Galeano (aunque haya tenido mucha más presencia en los medios de comunicación) o de Don Samuel Ruiz; no se diga si se menciona a Carlos Núñez, a Raúl Leis o a Berta Cáceres.

Esto indica, simplemente, que hay personas que se constituyen en personajes para determinados grupos sociales y no para otros. Es como si me mencionaran dos o tres  personajes muy importantes entre matemáticos, físicos o químicos, cuyos nombres  nunca he escuchado en mi vida.

Bueno, este preámbulo es para contar un poco que Leonardo Boff y su compañera Marcia estuvieron hoy en El Bodegón (espacio de usos múltiples) con el equipo IMDEC y allegadas/os. Don Leonardo es un personaje para un grupo importante de católicos y no católicos en el mundo. Es un personaje que a la vez que cuenta con un amplio grupo de fans, tiene también sus detractores, especialmente en un sector de la jerarquía eclesiástica. (Curiosamente Boff, según entendí, es fan del Papa Francisco, y yo creo que el Papa Francisco es igualmente fan de Boff).

Sobra decir que el IMDEC, sus integrantes y amigos/as, somos en buena parte fans de Don Leonardo y su palabra nos significa, por eso le invitamos a estar en Guadalajara con motivo del 50 aniversario (2013). Alguien les recomendó que no vinieran entonces, por el clima de violencia e inseguridad que prevalecía en México. Pero hoy llegó Boff a Guadalajara junto con Marcia, en el mismo clima o tal vez peor, para compartir su palabra.

Don Leonardo, con abundancia de pelo y barbas blancas, con pausado andar y con amable y tierna sonrisa, tuvo siempre una palabra tranquila, analítica, crítica, amplia y puntual a las preguntas que le hicimos, alimentada con acertadas intervenciones de Marcia, ella también con cabellera cana.

Sobre las palabras de Don Leonardo y de Doña Marcia en torno a los temas que les propusimos, en el IMDEC tenemos la intención de compartirlas más adelantito, una vez que trabajemos el material de registro en video que estamos haciendo, sea en productos editados que subamos a la web o para ser usados en nuestros procesos de formación.

Nos sentimos contentos, alegres, por este primer encuentro con Doña Marcia y Don Leonardo: sustancioso, reflexivo, gustoso…en la medida en que si bien una amplia población del mundo coincidimos en que este sistema hegemónico capitalista, neocolonialista y patriarcal no nos sirve para vivir a todas y todos la vida como humanos, Leonardo y Marcia, nos lo vienen humildemente a recordar con un énfasis de amor y de esperanza, convocándonos a dar lugar al espíritu.

En efecto, para cierto grupo social, Don Leonardo es un gran personaje (podría acotarlo al mundo de la Educación Popular, pero considero que va mucho más allá). Leonardo Boff para mí es una persona –que no individuo- coherente y congruente, muy consciente de su dignidad. Nunca ha renunciado a su misión, antes con sotana, ahora sin sotana, sigue transmitiendo su sentipensamiento inteligente y amoroso, hablado y escrito. Boff es un personaje muy importante, todavía con vida, que nos habla a quienes estamos habitando este planeta.

Luis Fernado Arana

19 de mayo 2016